LOS NIÑOS ELEGIDOS, DISTOPÍA FUTURISTAPARA REPENSAR NUESTRO PRESENTE
El yeclano Carlos Rubio Palao estudió Biotecnología en Murcia, vivió en Singapur dos años y actualmente estudia Literatura y trabaja en Madrid como corrector y lector editorial. Acaba de publicar su primera novela, Los niños elegidos, el inicio de una saga de ciencia ficción.
La premisa de la primera novela del escritor murciano Carlos Rubio Palao es sencilla, aunque se rodee de ciencia ficción y fantasía: adolescentes con poderes encerrados en una especie de escuela empiezan a dudar de ellos mismos y de todo lo que les han contado, deciden investigar y saltarse un poco las normas y… voilá, acaban llevándose alguna que otra sorpresa. ¿Les suena el mito de la caverna de Platón? Pues metido en una coctelera con una distopía adolescente y un anime de mechas (robots) daría un cóctel muy parecido al de este libro, primera parte de una ambiciosa tetralogía que la joven editorial barcelonesa Numak Ediciones publicó el pasado mes de marzo como segundo título de su catálogo.
Carlos Rubio Palao siempre tuvo claro que le gustaba escribir, pero no se lo planteaba como opción laboral cuando en 2009 empezó a estudiar el Grado en Biotecnología. Al acabar la carrera tenía claras dos cosas: que la ciencia no era su camino y que escribir se había convertido ya en una verdadera vocación. Entendió, no obstante, que con intención y muchas ganas no sería suficiente, así que decidió viajar a Singapur y trabajar allí unos años para, de vuelta a España, poder permitirse una nueva carrera universitaria, esta sí de letras, esta sí relacionada con aquello a lo que se quería dedicar. Fue allí, en Singapur, donde quizá inspirado por los rascacielos futuristas, y bebiendo de su formación científica, terminó la que sería su primera novela publicada: el inicio de una saga juvenil-adulto de ciencia ficción.
Lo único que les importa de nosotros es el Don. No sé todavía por qué lo quieren, por qué lo necesitan, pero te aseguro que lo descubriré cuando salgamos de aquí.
De vuelta a España en 2018, Carlos Rubio Palao estudió Literatura General y Comparada en la Universidad Complutense de Madrid, hizo un Máster en Escritura Creativa y entró en contacto con la parte teórica y laboral del mundo literario. Así fue como Carlos dio forma a la saga que completaría la novela que tenía bajo el brazo, y como empezó a colaborar con editoriales y clubes de lectura. Los niños elegidos iba a ser publicada en 2022 por una editorial almeriense que tras la crisis del COVID 19 se vio obligada a quebrar, pero llamó la atención de otra joven editorial barcelonesa, Numak Ediciones, que se puso en contacto con el autor y se interesó por el proyecto. Hoy día trabaja como lector, corrector y colaborador externo de varias editoriales, lo que le ha ayudado a aunar finalmente metodología y disciplina científica con vocación y conocimientos narrativos en su primer libro publicado. Los límites éticos y morales de la investigación y la tecnología, así como de la ambición humanas, son temas que sobrevuelan Los niños elegidos.
En cuanto al tono, la novela bebe mucho de El juego de Ender (1985) de Orson Scott Card, ya que a pesar de estar protagonizada por adolescentes de unos 16 años, la historia gira en torno al deber y la obediencia bajo una atmósfera oclusiva y autoritaria. Trata así temas iniciáticos como el paso en umbral de niño a joven adulto, o el coming of age. Por eso los protagonistas de Los niños elegidos, como los integrantes más curiosos de la caverna de Platón, acaban obsesionados por descubrir “la verdad”, siendo al mismo tiempo esta verdad la naturaleza de Nación, de la Escuela de Poder y del Don mismo, y la identidad que, como cualquier adolescente, ellos mismos están en proceso de forjar.
Misterio, ritmo, acción, romances adolescentes, alianzas, traiciones, megacorporaciones, inteligencia artificial… La saga que Carlos Rubio Palao apunta con esta novela a la diana de los lectores que hace unos años disfrutaron con el boom de las distopías adolescentes de Los juegos del hambre o Divergente, pero con un estilo y ritmo propios que la hace horizontal, un proyecto sólido capaz de atrapar a lectores de todo tipo además de a los asiduos del género.
De la mano de unos jóvenes con habilidades extraordinarias que solo quieren saber cuál es su lugar en este mundo, la saga de Titán pretende dibujar una Tierra hostil, hipercapitalista y ecológicamente devastada —una Tierra no tan distinta a la nuestra si lo pensamos fríamente en realidad—, en la que la especie humana haría cualquier cosa por sobrevivir. Lo que los protagonistas tendrán que preguntarse y responderse en última instancia es si la humanidad puede seguir viviendo tal y como ha hecho hasta ahora, y lo que es más terrible: si merece hacerlo. Ética, moral, deber, opresión, libertad y búsqueda de una identidad propia, eso encontraremos en esta primera novela, que Carlos se ha tomado su tiempo en sacar a la luz, pero que ahora es tan nuestra como suya.